Autor : Laura María Espinosa Estrada

Artillería Verde Sur entregando ayudas a familias afectadas por incendio en el barrio Milagro de Dios, que se presentó el año pasado.
En la actualidad, Artillería Verde Sur cuenta con 23 parches activos, espacios donde se apuesta a la transformación social.
Pasión por una camiseta, amor, cantos, ilusiones, frustraciones y alegrías son algunos de los sentimientos que los barristas de la Artillería Verde Sur sienten por la camiseta del Deportes Quindío.
A mediados de junio de 2001 nació esta barra en el municipio de Montenegro, un grupo de hinchas que decidió demostrar su pasión siguiendo al equipo por todos los rincones del país y desde entonces se formó como una gran familia. Tiempo después y gracias a su mismo sentimiento, otras personas, en especial de la ciudad de Armenia, quisieron hacer parte de la barra realizando el primer viaje como hinchada fiel a Rionegro.
En la actualidad trabajan por cambiar la mala imagen que se tiene sobre los barristas en el país, así que decidieron adoptar prácticas que no solo los uniera como grupo, sino que les permitiera demostrar su fuerza y humanidad fuera de las canchas, así lo expresó Juan David Bermúdez, líder de Artillería Verde Sur. “Esta es una barra que vive por el Deportes Quindío, la cual fecha tras fecha, antes de cada partido, se reúne a analizar el partido que pasó y el partido que viene, nos reunimos a pensar en qué salida vamos a hacer para el equipo, pero también nos reunimos para analizar los diferentes problemas de la barra y desde allí mirar cómo podemos ayudar a nuestros integrantes. En el momento tenemos 30 barristas están estudiando para terminar su bachillerato”.
A través de la práctica del barrismo social, hicieron de sus fortalezas como familia, una alternativa de transformación que nació de la necesidad de evidenciar las realidades no solo de la hinchada, sino también del entorno que les rodea.
Dentro y fuera de la cancha
Con la necesidad de generar una impacto diferente y positivo dentro y fuera de la cancha, esta barra decidió dedicar los mismos esfuerzos hechos por el equipo, pero aplicados en los diferentes barrios del departamento, intentando actuar como herramienta social.
“Nosotros como barra realizamos actividades sociales en los diferentes barrios de la ciudad y el departamento, con la idea de que la gente vea que no somos el punto negro de la ciudad, si no que somos actores importantes en nuestro departamento, buscando darles un mensaje diferente a los integrantes de la barra, ya que algunos creen que llegar a la barra es generar violencia y ese pensamiento desde hace mucho tiempo lo erradicamos, ahora le apostamos a lo social”, afirmó Bermúdez.
La razón social legalmente constituida Orgullo Cafetero llegó a la Artillería Verde Sur en 2016, una entidad sin ánimo de lucro con fines de beneficencia, interés común y mejoramiento de la calidad de vida y el bienestar común, a través del desarrollo de actividades culturales. La fundación tiene como objetivo fomentar y difundir la cultura del barrismo social, el respeto y la convivencia en todo tipo de población.
El líder de la barra explicó que, a través de esta corporación, también le apuestan al crecimiento social. “Tenemos clubes deportivos (femenino, infantil, y libre), un grupo que se llama raíces quindianas con quienes hacemos cine bajo las estrellas y actividades lúdicas para los niños, entre otros espacios.
Los parches
Los parches son un grupo de amigos del mismo barrio que, unidos por la misma pasión, pertenecen a la barra y lideran actividades sociales. Actualmente hay 23 parches activos con integrantes de toda la ciudad y el departamento. Cada jueves estos parches se reúnen en el parque cafetero con la intención de programar y dividir actividades mensuales, en las que se celebran los días conmemorativos.
Como apoyo a los parches se creó Raíces Quindianas, un espacio pensado en infundir en los niños un sentido de pertenencia por la ciudad y el departamento; este grupo está conformado por mujeres activas de la barra que se encargan de estar ligadas a las actividades que lideran los parches en conmemoración de los días especiales estipulados a nivel internacional o nacional.
Así mismo, ‘La banda del milagroso’ es un proceso en el cual los integrantes se instruyen en música y, además, le aportan a la sociedad en las labores que hacen los parches, cuenta con 20 músicos que tienen conocimiento en percusión, vientos y murga. Es el grupo más viejo dentro de la barra con instrumentos propios.
El objetivo de estas labores sociales es cambiar el pensamiento de los integrantes de la barra, para mitigar la violencia que se vive no solo dentro de los espacios deportivos, sino fuera de ellos. Así mismo, internamente estas labores han logrado una gran acogida y conciencia por medio de la difusión que se hace desde la parte comunicativa, además la carnetización, que ayudó al orden y caracterización de los integrantes.
“El objetivo es cambiar la intención de los integrantes, que se concienticen que la barra no es para hacer infundir violencia, sino más bien que sientan que somos la barra del departamento y que, por ende, debemos de ser propositivos. Gracias a ello aquí en el departamento llevamos más de 5 años sin peleas de barras y mejor aún, sin un muerto. En todas estas actividades que hacemos la regla número uno es que no se puede consumir ningún tipo de sustancia sicoactiva”, explicó Buitrago.
Aparte de todas las actividades, la barra cuenta con escuelas de música todos los sábados en el estadio Centenario para las personas que estén interesadas en aprender a tocar algún instrumento.