Desde hace ocho años, en la finca Las Caucheras, vereda La Concha de Circasia, a un grupo de 83 mujeres desplazadas por la violencia, les adjudicaron un predio de 80 hectáreas para que iniciaran proyectos productivos, durante los primeros cuatro años, se lograron algunas gestiones, pero una vez finalizado el Incoder, con quien adelantaron el programa, los inconvenientes comenzaron. Con un largo aguante han logrado sobrevivir, unas se fueron y otras quedaron.
COMENTA ESTE ARTÍCULO
En cronicadelquindio.com está permitido opinar, criticar, discutir, controvertir, disentir, etc. Lo que no está permitido es insultar o
escribir palabras ofensivas o soeces, si lo hace, su comentario será rechazado por el sistema o será eliminado por el administrador.