Autor : Daniel Alejandro Restrepo Tabares

Germán Alberto Bahamón Jaramillo expone varias estrategias para aumentar el área de café cultivada y dinamizar este renglón de la economía.
Bahamón Jaramillo, aspirante a la gerencia general de la Federación Nacional de Cafeteros, propone 3 caminos para lograr el incremento del parque cafetero en el Quindío.
Huilense de nacimiento, pero con amplio conocimiento en los temas cafeteros del país. Germán Alberto Bahamón Jaramillo hoy es uno de los aspirantes a ocupar el cargo más importante dentro de la Federación Nacional de Cafeteros, que se definirá el próximo 27 de abril y dentro de sus ideas para renovar el parque cafetero propone retomar el Plan 100-100 de la FNC, hoja de ruta de la caficultura colombiana que cumpliría con las expectativas de los cafeteros que fueron quienes lo crearon.
Para el caso del Quindío, donde la disminución del parque cafetero preocupa a los caficultores de la región dado que el área sembrada en café apenas supera las 18.400 hectáreas, Germán Alberto Bahamón Jaramillo propone 3 ideas que desde su opinión dinamizarían la economía y mejorarían las áreas cultivadas y la productividad.
La primera estrategia está enfocada en el fortalecimiento de la garantía de compra del café, a través del robustecimiento del sistema cooperativo y asociativo que permita que esa garantía de compra, que es el fin único de la federación, siga diferenciando de cualquier otro renglón agrícola.
“Hay que seguir trabajando en una reingeniería de procesos que permita que las cooperativas puedan seguir prestando ese servicio a la comunidad cafetera de la garantía de compra”, manifestó Bahamón Jaramillo.
En segundo lugar, el aspirante a la gerencia de la Federación Nacional de Cafeteros plantea el acceso a créditos para el caficultor. “Si nosotros queremos seguir creciendo en área cultivada y haciendo la renovación adecuada anual a nuestros cafetales para mantenerlos jóvenes y productivos, debemos acudir a que el Gobierno nacional nos acompañe con la política de Incentivo a la Capitalización Rural, ICR, hoy tenemos la gran coincidencia de quien creó el ICR en Colombia en 1993 fue el ministro de Agricultura, José Antonio Ocampo, quien hoy es el ministro de Hacienda”, precisó.
En este aspecto también propone buscar la posibilidad de una cobertura de tasa en el crédito que permita que la renovación de los cafetales sea una opción para el caficultor.
“En los últimos 2 años la renovación ha sido baja debido a que ha habido un fenómeno climático que había impedido la luminosidad, mucha lluvia, baja productividad y eso ha hecho que el caficultor no haga la renovación de su cafetal, así que hay que buscar con estas coberturas de tasa la posibilidad de que se sientan más tranquilos y que puedan acudir a esa renovación que va a permitir a la postre una juventud del cafetal y una productividad”, señaló el aspirante a la gerencia de la federación.
Germán Alberto Bahamón Jaramillo dice que se debe trabajar en temas de infraestructura a través del mejoramiento de vías terciarias y una vivienda cafetera digna además de la industrialización.
“El Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno nacional está buscando activar fuertemente las vías terciarias y hay que trabajar para que el cafetero colombiano tenga la posibilidad de sacar su producto de una manera menos costosa y más eficiente de sus cafetales y tener en mejores condiciones su vivienda”, explicó Bahamón Jaramillo.
Señaló que se debe tener en cuenta la industrialización de las regiones. Como ejemplo indicó que en el Huila hay 430 marcas de café, lo que quiere decir que hay un interés importante de los caficultores de llevar su producto de la finca a la taza y hay que acompañarlos a los caficultores para que esa industrialización sea acompañada con conocimiento en las regiones.
“Un cafetero necesita alrededor de 3 años para sacar su primer café que pasa del semillero a la chapola, después al trazado, al ollado, a la siembra y la cosecha. Pero si él decide hacer una transformación de su producto para agregar valor en la cadena productiva la Federación tiene que acompañarlo y qué bonito sería que acompañáramos también a los jóvenes, que los jóvenes del Quindío entiendan que hay una vida detrás del café”, precisó.
Dijo que el Quindío ha sido pionero en la caficultura en el país y hoy ha encontrado también en el turismo una fuente importante de desarrollo económico. “Qué importante que combinemos esa fuente de desarrollo económico tanto agrícola como de turismo, creo que ahí hay un tema importante para que el joven entienda que hay posibilidades de capacitarse en agronomía, pero también en catación, en tostión, en barismo y que encuentre en esas apuestas productivas el comercio de su producto y que le devuelva el orgullo y arraigo por su tierra para querer volver a cultivar”, puntualizó Germán Alberto Bahamón Jaramillo.