
El documental llegará al público, financiado gracias a la convocatoria lanzada en 2009 por la Orquesta Filarmónica de Bogotá, la fundación Gilberto Alzate Avendaño y el Instituto Distrital de Turismo.
El evento se llevará a cabo en medio de la inauguración del festival 2010, donde también se hará un homenaje al reconocido músico y compositor Chucho Merchán, por su aporte creativo en la difusión de los sonidos y la imagen del rock colombiano.
Posteriormente, para el público en general, se presentará en varios escenarios de Bogotá. Asimismo, se realizará un recorrido por la televisión nacional en julio y agosto y finalmente se subirá a una página en internet para que indefinidamente, rockeros, fanáticos de la música, quienes crecieron con el festival puedan bajarlo y tenerlo en su casa.
El poder del rock en imágenes
El proceso inició hace un año cuando la Orquesta Filarmónica de Bogotá, la Fundación Gilberto Alzate Avendaño y el Instituto Distrital de Turismo, a través de una convocatoria abierta, ofrecieron la financiaron del documental oficial de los 15 años de Rock al Parque. En competencia habían 15 proyectos y el ganador fue Labororatorios Black Velvet, empresa vinculada a diversos procesos cinematográficos, desde la promoción, divulgación, distribución y exhibición.
“Queríamos que no sólo fuese cinematográficamente poderoso, es decir que toda su fuerza no estuviera concentrada en el dominio de las herramientas audiovisuales, sino que las cabezas de equipo tuvieran una muy fuerte relación con la música e idealmente con el rock nacional”, afirmó Jaime E. Manrique, productor del documental.
“Desde el inicio me planteé que este era un documental de la historia de nuestros músicos, de nuestras bandas; de cómo un país tan singular como Colombia logra influir con su geopolítica y su pasión a miles de jóvenes que dejan escapar en sus letras el odio o simpatía por lo que va pasando frente a sus ojos” anotó Klych López, director.
El rodaje
27, 28 y 29 de junio de 2009, fueron los días para el rodaje. El equipo de producción fue de 54 personas y a lo largo de los procesos de pos producción de audio y vídeo, la ardua recopilación de imágenes de archivo y el diseño de todas las piezas, se vincularon al final más de 70 personas.
Durante el rodaje se trabajó con dos unidades principales en RED ONE y 10 cámaras HD que cubrían el evento desde diversos ángulos; la apuesta fue escoger diez realizadores que hubieran sido en su mayoría directores de la selección oficial del festival In Vitro Visual a lo largo de su historia y que en sus cortos hubieran reflejado un estilo concreto y valioso para aportar al documental.
Se entrevistaron cerca de 80 personajes que fueron escogidos durante la preproducción, entre ellos quienes le dieron vida al festival, vocalistas de las primeras bandas invitadas, los gestores que hacen posible el evento actualmente, bandas internacionales, periodistas ligados a la música y quienes han hecho de este espacio uno de los más poderosos ejemplos de convivencia en Bogotá y el más grande festival de rock gratuito de latinoamérica: el público, quienes además son el hilo conductor durante los 33 minutos que dura el documental.
Funciones de estreno
23 junio
Premier.
Teatro municipal Jorge Eliécer Gaitán.
Hora: 7:00 p.m.
29 junio
In Vitro Visual, lo mejor del cine joven colombiano.
Hora: 8:00 p.m.
2 julio
Centro cultural La Media Torta, viernes de cine.
Hora: 7:00 p.m.
Sinopsis
Quince años parece poco tiempo, pero en realidad es el suficiente para creerse la mentira de que ya se es grande, engaño fácil si tan solo se tienen 15. Esa edad rebelde y deseosa de oponerse al sistema, la mayoría de las veces, da la conciencia del entorno y las herramientas para enfrentar los siguientes quince. Así, desde la más emocionante ingenuidad, hasta la delirante certeza de que ha tenido sentido y sigue valiendo la pena, se narran quince años del festival de rock gratuito más grande de América Latina y uno de los más importantes del mundo.
Desde las voces de quienes tuvieron la idea inicial, de quienes han puesto en juego sus sueños y más profundas esperanzas, de aquellos que han creído que es posible una fiesta anual de tres días para celebrar la convivencia, en un país que es noticia por su capacidad de intolerancia, y sobre todo desde un público que con su fidelidad lo hace memorable año tras año; se recorren algunos de los momentos más mágicos e incluso difíciles de este evento que convierte a la capital de Colombia en un paraíso de la diversidad y el respeto, al ritmo de estridentes y liberadores acordes. Esta no es la historia de rock al parque, ni la del rock en Colombia, ni la de este país del Sangrado Corazón y el Divino Niño, y al mismo tiempo intenta ser todo eso en quince años.