El Quindío se ubicó en el puesto 12, lejos de su mejor posición que fue la 7, obtenida en 1988, cuando también fue local.
Se bajó el telón de los XXII Juegos Deportivos Nacionales. La ceremonia de clausura en la Plaza de Bolívar de Manizales, además de marcar el cierre de las justas y abrirle las puertas a los VI Juegos Paranacionales sirvió para dejar el mensaje de que el deporte es la herramienta perfecta de transformación de sociedades.
Después de 15 días de competencias y de vivir historias inigualables, los Juegos llegaron a su fin y la delegación del Valle del Cauca se coronó campeona, tras finalizar con 209 medallas de oro, 152 de plata y 127 de bronce, para un total de 488 metales.
La delegación quindiana no logró igualar lo conseguido en 1988, cuando alcanzó 11 de oro, 10 de plata y 26 de bronce y así la posición 7 de la clasificación general, pero sí consiguió una honrosa posición con 28 medallas, 13 de bronce, 7 de plata y 8 de oro.
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