Autor : Laura María Espinosa Estrada
Al día, su club cuenta con 96 deportistas, en los municipios de Circasia y Calarcá, y en la ciudad de Armenia.
Como premio a su labor por el deporte, fue nombrado por la Federación Colombiana de Paravoleibol, como coordinador del campeonato de voleibol sentado que hará parte de los IV Juegos Paranacionales Eje Cafetero 2023 Carlos LLeras Retrepo, a desarrollar en Armenia del 1 al 7 de diciembre.
Por medio del deporte, en especial el voleibol, Juan Arles ha podido desarrollar sus más grandes habilidades, esas que lo hacen distinguirse entre familiares, alumnos y padres de familia como un entrenador perseverante, noble y muy disciplinado.
Juan Arles Buitrago Valencia nació en el municipio de ‘Hombres y Mujeres Libres’, donde recuerda todo el transcurso de su vida.
A los 14 años, con el deporte como su eje central, empezó a participar, en la modalidad de voleibol, en los juegos intercolegiados, donde consiguieron, en una ocasión, la presea dorada. Motivado por la sensación de satisfacción que este le generaba, siguió participando de otros espacios, juegos y festivales, lugares donde se le fue fomentando más el gusto, y el cual desde hace 22 años, se ha convertido en su diario vivir.
Su vida siempre ha girado en el voleibol, cuyo proceso como instructor inició en 1999, luego de llegar de unos juegos nacionales intercolegiados, donde con la intención de nunca dejar de entrenar, pero de estudiar para pulir esos conocimientos que, por cuestiones de la vida le fueron apasionando, se fue involucrando más con el amor que le inspira verse reflejado en los deseos y esfuerzos de cada uno de sus deportistas.
Con entrenamientos que inicialmente empezó a dictar en el colegio San José de Circasia, se empezaron a abrir puertas llenas de muchas oportunidades para él, porque aunque inició de forma empírica, cada día fue mostrando sus frutos, hasta ser visto por la alcaldía municipal, quien en primera instancia le dio un voto de confianza para empezar así con la tecnología
Así mismo, en este camino de la vida lleno de victorias y sacrificios, ha podido trabajar con administraciones municipales, Indeportes, y su más grande acierto, el club Golden, hogar que desde el 2019, le ha permitido gozar de triunfos y de la visibilidad que tiene hasta ahora, el que realizado a pulso, le ha hecho merecedor del respeto y de formar una familia deportiva.
¿Algún día pensó en convertirse en el tipo de entrenador que es hoy día?
La verdad es que no, porque en el deporte no se abrían muchas puertas, entonces yo inicié con un propósito y un gusto más que todo personal por enseñar a los niños y no pasar de ahí, pero no creí algún día tener contrato, o algo similar; pese a esto, al empezar e ir pasando el tiempo y obteniendo experiencia, me di cuenta que había que trabajar la base, la parte formativa, y en el departamento, fui el primer profesor que inició con esos equipos base, con niñas desde los 7 años. Partiendo de ahí, creé un club llamado Pequevoley, el que duró año y medio en funcionamiento, luego me fui para Salento a entrenar y en el 2019 nació Golden.
¿Qué puede contarnos sobre el club Golden, qué ha significado en su proceso?
Este nació en 2019, y desde entonces se me han abierto muchas puertas, además de que empecé a ver el deporte y el voleibol de una forma más diferente, más productiva y profesional; motivado, empecé a hacer las cosas de la mejor manera posible, proyectándome hacia una federación y liga y de esta forma todo se ha venido dando de la mejor manera. Iniciamos con un grupo pequeño, y al día hay 96 deportistas, con 120 monitores, teniendo en cuenta que este es el nombre que se le da a los entrenadores del municipio.
¿Cómo ha sido la transición de tener un pequeño grupo a convertirse en un referente del deporte para muchos pequeños y jóvenes?
Este tema lo he tratado mucho con algunos padres de familia y siento que he trabajado desde los dos extremos, he estado en el extremo donde al papá no le interesa el niño, donde no hay algún aporte, entonces el niño solamente entrena, nunca sale a jugar, no hay competencias, porque el apoyo gubernamental es muy poco y el deporte cuesta, pero es un tema que no me parece mal. Ahora con el nuevo proceso con Golden, un club que ha sacado jugadoras buenas y ha sido representativo a nivel Colombia con logros, cuento la historia de que a veces me tocaba darle dinero a un niño para poder ir a Salento un día a competir, ya que este es un valor agregado y es que desde el 2008 vinieron los torneos al departamento y tuve que ver en ello y ya luego vino un torneo más grande, la Copa Golden de la Libertad.
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¿Cómo nació la Copa Golden de la Libertad?
Esta copa es reconocida como el torneo más grande de Colombia en su ámbito, y nació desde el mandato de la actual alcaldesa de Circasia, antes se realizaba en Salento y se llamaba Copa Nacional ‘La palma de cera’, pero ahora se nombró de esta forma, teniendo en cuenta la denominación del pueblo. Ahora son 117 equipos los que se reúnen a disputar esta copa, a todos se les da uniforme, cuenta con una buena organización, tiene horarios establecidos y respetados, y se ha convertido en un referente en el país y en Circasia, municipio que era sonado por la parte turística, pero que por el deporte no era muy conocido y este espacio le ha brindado otro tipo de visibilidad.
¿Cómo fue posible llegar a ser el coordinador de los juegos paranacionales en la rama de voleibol sentado?
Creo que este proceso se viene dando a través de los logros que se han obtenido, teniendo en cuenta que en muchos lugares de Colombia nos conocen, conocen el club, a Juan Arles, y los eventos que hacemos nosotros, de donde creo que viene ese nombramiento, la liga Antioqueña puso mi nombre en la mesa, porque saben lo que hacemos y a lo que le apuntamos, entonces creo que es no por ser el mejor entrenador, no, es más por la calidad de eventos que hacemos.
¿Cuáles son sus próximos retos?
El solo hecho de que las niñas a las que dirijo tengan el tiempo ocupado entre el estudio y el deporte, y que eso les represente un beneficio más adelante en una universidad, es muy satisfactorio, así mismo, el hecho de tener una jugadora referente en la selección Colombia sería uno de los mayores retos, pero no es tanto salir a quedar campeón, sino que este proceso garantice algo más allá en diferentes proyectos.
